viernes, 8 de marzo de 2013

VENEZUELA TIERRA DE MITOS

“Nuestra generación no se lamentará tanto de los crímenes de los malvados como del estremecedor silencio de los cobardes”
Martin Luther King.

A raíz de la muerte de Hugo Chávez, hemos podido ver facetas inéditas en la vida republicana. No sé si habrá en los anales de la historia otro hito parecido, pero en la contemporaneidad, es la primera vez que un proceso electoral da inicio en un velorio y la máxima representante del árbitro electoral, entiéndase CNE, da muestras públicas con impunidad absoluta, de su total parcialidad con el muerto y su ideología. Cosas vederes Sancho....

La marea impresionante de gente que se ha hecho presente en el lugar de las exequias, me obliga a preguntarme: ¿será que realmente somos necrofilicos o el morbo forma parte de nuestro día a día? No con esto quiero criticar o irrespetar a esa masa impresionante de seres humanos que se hicieron presentes para ver por ¿última vez? a su figura de pater family o guía espiritual, todo lo contrario, mi mayor respeto a ellos, lo que pasa es que ver algo inimaginable para muchos, me obliga a investigar un poco y profundizar en cosas hasta ahora evitadas. No es fácil ver ríos de gente asistiendo de manera ordenada para estar presentes en los actos fúnebres, gente que quizás muchos de ellos, ni siquiera derramaron una lágrima ante la desaparición física terrenal de algún familiar, pero que ahora dan muestras de amargo y profundo dolor por alguien conocido pero no de la familia. Este fenómeno debe ser estudiado y comprendido para poder entender la sociología del venezolano pos, pos moderno.

La historia se escribe en distintos tiempos, en distintos cuadernos y con distintos adminículos para la escritura. No están lejos los tiempos de la escuela, dónde estudiamos y escuchamos de boca de nuestras (os) maestras (os) la historia fabulada del Bolívar Dios, acaso para algunos con un poco más de conciencia, un semi Dios, el cual ahora parece amenazado de desaparecer frente a la figura endiosada por muchos de Hugo Chávez.

Es indudable que una gran parte del pueblo venezolano está de luto y de duelo, sin importar raza ni credo, pero muchos no saben siquiera que es el duelo y como se configura, al respecto podemos tomar a manera referencial lo expresado en wikipedia: El duelo es el proceso de adaptación emocional que sigue a cualquier pérdida (pérdida de un empleo, pérdida de un ser querido, pérdida de una relación, etc.). Aunque convencionalmente se ha enfocado la respuesta emocional de la pérdida, el duelo también tiene una dimensión física, cognitiva, filosófica y de la conducta que es vital en el comportamiento humano y que ha sido muy estudiado a lo largo de la historia.

El médico Psiquiatra Luís Jorge Gamboa Albornoz define duelo como: el conjunto de manifestaciones fisiológicas, intelectuales, emocionales, conductuales y espirituales que se manifiestan como consecuencia de una pérdida. En ninguna otra situación como en el duelo, el dolor producido es TOTAL: Es un dolor biológico (duele el cuerpo), psicológico (duele la personalidad), social (duele la sociedad y su forma de ser), familiar (nos duele el dolor de otros), y espiritual (duele el alma).

A pesar de las noticias de la enfermedad del Presidente y de su hospitalización para tratarse, el manejo mediático acerca de la salud del Presidente dado por los representantes gubernamentales, alentaron siempre en la población la esperanza de su sanación y reaparición en la escena política, de tal manera que aunque era una muerte anunciada, cuando esta se produce, el shock colectivo producido por la noticia, fue de un gran impacto negativo para el país. De inmediato la gente se lanzó despavorida a la calle buscando regresar a sus hogares, llenar los tanques de los vehículos de combustible, comprar comida, velas y otros enseres que la conseja popular nos ha enseñado a tener a mano para casos de desastre. La ciudad se volvió un caos.

Si, está bien escrito, para casos de desastre. La muerte del Presidente casi se configura en un desastre. La hora escogida para dar la noticia, ellos sabrán porque fue esa, lo cierto fue que en la práctica casi produce un desastre. Otro desacierto más en la cadena de eventos de la vida nacional.

El duelo para ser superado, debe procesarse y la mayoría de los psicólogos coinciden en las etapas que el mismo conlleva:

1)  Negación y aislamiento: la negación nos permite amortiguar el dolor ante una noticia inesperada e impresionante; permite recobrarse. Es una defensa provisoria, y pronto será sustituida por una aceptación parcial: “no podemos mirar al sol todo el tiempo”.

2)  Ira: la negación es sustituida por la rabia, la envidia y el resentimiento; surgen todos los por qué. Es una fase difícil de afrontar para los que los rodean; esto se debe a que la ira se desplaza en todas direcciones, aún injustamente. Suelen quejarse por todo; todo les viene mal y es criticable. Luego pueden responder con dolor y lágrimas, culpa o vergüenza. La familia y quienes los rodean no deben tomar esta ira como algo personal para no reaccionar en consecuencia con más ira, lo que fomentará la conducta hostil del doliente.

3)  Negociación: ante la dificultad de afrontar la difícil realidad, mas el enojo con la gente y con Dios, surge la fase de intentar llegar a un acuerdo para superar la traumática vivencia

4)  Depresión: cuando no se puede seguir negando el hecho acaecido, la persona se debilita, adelgaza, aparecen otros síntomas y se verá invadida por una profunda tristeza. Es un estado, en general, temporario y preparatorio para la aceptación de la realidad en el que es contraproducente intentar animar al doliente y sugerirle mirar las cosas por el lado positivo: esto es, a menudo, una expresión de las propias necesidades, que son ajenas al doliente. Esto significaría que no debería pensar en su duelo y sería absurdo decirle que no esté triste. Si se le permite expresar su dolor, le será más fácil la aceptación final y estará agradecido de que se lo acepte sin decirle constantemente que no esté triste. Es una etapa en la que se necesita mucha comunicación verbal, se tiene mucho para compartir. Tal vez se transmite más acariciando la mano o simplemente permaneciendo en silencio a su lado. Son momentos en los que la excesiva intervención de los que lo rodean para animarlo, le dificultarán su proceso de duelo. Una de las cosas que causan mayor turbación en los familiares es la discrepancia entre sus deseos y disposición y lo que esperan de ellos quienes los rodean.

5)  Aceptación: quien ha pasado por las etapas anteriores en las que pudo expresar sus sentimientos -su envidia por los que no sufren este dolor, la ira, la bronca por la pérdida del ser amado y la depresión- contemplará el próximo devenir con más tranquilidad. No hay que confundirse y creer que la aceptación es una etapa feliz: en un principio está casi desprovista de sentimientos. Comienza a sentirse una cierta paz, se puede estar bien solo o acompañado, no se tiene tanta necesidad de hablar del propio dolor… la vida se va imponiendo.

A esos venezolanos que hoy lloran con amargura la partida de su líder, hay que darles tiempo para procesar su duelo, sin olvidar que existe otra parte del país para quienes la vida continúa y se acercan unas elecciones presidenciales signadas por la explotación del dolor, la incertidumbre y el más grande ventajismo electoral basado en la explotación mítica de la figura del muerto.

Venezuela tierra de mitos. Desde nuestro descubrimiento hasta el presente, hemos conocido los mitos que giran alrededor de esta tierra. Desde los espejitos y la resistencia indígena pasando por el dorado, hasta el oro negro, Venezuela ha sido tierra de mitos.

Basándome nuevamente en wikipedia, tenemos que los mitos pueden definirse así: Un mito (del griego μῦθος, mythos, «relato», «cuento») es un relato tradicional que se refiere a acontecimientos prodigiosos, protagonizados por seres sobrenaturales o extraordinarios, tales como dioses, semidioses, héroes, monstruos o personajes fantásticos. Los mitos forman parte del sistema de creencias de una cultura o de una comunidad, la cual los considera historias verdaderas. Al conjunto de los mitos de una cultura se le denomina mitología. Cuanto mayor número de mitos y mayor complejidad tiene una mitología, mayor es el desarrollo de las creencias de una comunidad. La mitología sustenta la cosmovisión de un pueblo.

Entre los principales tipos de mitos aceptados por la humanidad, tenemos:

1)  Mitos cosmogónicos: Intentan explicar la creación del mundo. Son los más universalmente extendidos y de los que existe mayor cantidad. A menudo, la tierra, se considera como originada de un océano primigenio. A veces, una raza de gigantes, como los titanes, desempeña una función determinante en esta creación; en este caso tales gigantes, que son semidioses, constituyen la primera población de la tierra. Por su parte, el ser humano puede ser creado a partir de cualquier materia, guijarro o puñado de tierra, a partir de un animal, de una planta o de un árbol. Los dioses le enseñan a vivir sobre la tierra.

2)  Mitos etiológicos: Explican el origen de los seres y de las cosas; intentan dar una explicación a las peculiaridades del presente. No constituyen forzosamente un conjunto coherente y a veces toman la apariencia de fábulas. Relatan el origen del hombre y de las cosas que se encuentran en el mundo. Por otro lado, intentan explicar los porqués de las situaciones presentes.

3)  Mitos Teogónicos: en estos mitos se narra la historia y origen de los distintos dioses. Estos dioses no necesariamente surgieron primero que el hombre, por lo que muchos mitos hablan de los humanos transformándose en dioses. La concepción que se tiene de estos es bastante humanizada, son muy similares al hombre y pueden ser sus héroes o víctimas.

4)  Mitos escatológicos: Son los que intentan explicar el futuro, el fin del mundo; actualmente, en nuestras sociedades aún tienen amplia audiencia. Estos mitos comprenden dos clases principales: los del fin del mundo por el agua, o por el fuego. A menudo tienen un origen astrológico. La inminencia del fin se anuncia por una mayor frecuencia de eclipses, terremotos, y toda clase de catástrofes naturales inexplicables, y que aterrorizan a los humanos.

5)  Mitos morales: Aparecen en casi todas las sociedades: la lucha del bien contra el mal, ángeles y demonios, etc. En definitiva, los inventos y las técnicas particularmente importantes para un grupo social dado se hallan sacralizados en un mito. Otros son antropogónicos, relativos a la aparición del ser humano.

6)  Mitos histórico-culturales: Son las creencias de tipo social, extendidas vulgarmente entre la población, basadas en una subjetiva interpretación historiográfica principalmente fundamentada en un malentendido, o en una truncada o parcial transmisión de realidad histórica. Se caracteriza por la imposibilidad de poder ser considerada como veraz, como se definiría para una estricta leyenda histórica, con cierto rango de certidumbre todavía no demostrada en el tiempo. Por lo que un mito histórico difiere principalmente de una leyenda, en que ésta última presenta cierto rango de incertidumbre frente a aquella, la cual cuenta con claras pruebas fehacientes, testimoniales o historiográficas que evidencia la falsedad, y que, posteriormente, ha sido difundida en la manera de un típico mito histórico-cultural, también llamado vulgarmente, leyenda urbana.

A partir de los tipos de mitos mostrados anteriormente y basado en los teogónicos, en Venezuela se han establecido mitos a lo largo de su historia para personajes como: la sayona, el hachador de Ospino, el silbón, el encadenado de Píritu, Juan machete, la llorona, la dientona, José Nicanor, María Lionza, el Santo Cristo de la Grita, el Cristo de Jose, el ánima de Pica Pica, el ánima de Taguapire, Guaicaipuro, Bolívar, Florentino y el diablo entre otros.

El imaginario popular del venezolano ha demostrado ser bastante fecundo y desde la leyenda del guaraira repano hasta nuestros días, se ha transmitido de manera oral y escrita la cosmovisión de nuestro pueblo, sin importar criterios científicos o del método científico, la fenomenología venezolana basada en lo sobre natural ocupa papel primordial en la población, a pesar de las prohibiciones de la iglesia católica.  

Es común ver en los altares venezolanos a María Lionza acompañada del Negro Felipe y del Cacique Guaicaipuro, quienes  conforman las “Tres Potencias”. Ellos son la base fundamental de un cielo de deidades y espíritus divididos jerárquicamente en “Cortes”. Entre las principales cortes tenemos:

1)  La Corte India.: Presidida por María Lionza (India Yara), el Cacique Guaicaipuro, Cacique Yoraco, Cacique Naiguatá, Reina Urimare, Cacique Mara, Tamanaco, India Tibisay, India Rosa... entre otros.

2)  La Corte Negra: Compuesta por el Negro Felipe a la cabeza, Negra Matea, Negra Francisca, Negro Pío, Negro Eloy, Macario Pantoja, Negra Tomasa, Negra Lorenza entre otros.

3)  La Corte Venezolana o Corte Libertadora: presidida por Simón Bolívar, Juan Vicente Gómez (dictador 1908-1935), el Generalísimo Francisco de Miranda, el Mariscal Antonio José de Sucre, José Antonio Páez...

4)  La Corte Africana: (los dioses de la religión Yoruba) representados en Las Siete Potencias Africanas: (Changó, Ochún, Yemanjá, Babalú Ayé, Ogún, Oyá, Orula, Eleguá…)...

5)  La Corte Celestial: conformada por los santos católicos: Jesucristo y la Virgen María en todas sus advocaciones, Santa Bárbara San Expedito, San Alejo, San Benito, San Francisco de Asís, Santa Clara de Asís, San Cipriano, San Sebastián...

6)  La Corte del Cielo: conformada por los Arcángeles: San Miguel, San Rafael, San Gabriel, Uriel, Chamuel, Jofiel y Zadkiel.

7)  La Corte Malandra: presidida por el Malandro Ismael, Félix Azuaje, Petróleo Crudo, Malandro Ratón, Isabelita, Luis, Miguelito, Antonio, tres cuchillos, el muelita, el chino, William, Oscarcito, la Cleo, el Chamo Candela, etc.

Fuente: http://marialionzayespiritus.blogspot.com/

En medio de la enfermedad de Hugo Chávez, pudo observarse como muchos venezolanos oraban por él y muchos otros lo anexaron a sus altares, de allí que surge la pregunta: ¿en cuánto tiempo escucharemos del primer milagro de Chávez?

Los mitos solo los construye el tiempo, pero en el caso de Chávez, su construcción comenzó con los mensajes enviados en vida y repetidos hasta la saciedad por sus acólitos.

“Repite una mentira mil veces y se convertirá en verdad. Esta frase cuya autoría se atribuye al encargado de la propaganda alemana durante el Tercer Reich (Paul Joseph Goebbels), en realidad ha sido utilizada desde épocas remotas hasta nuestros días. Todo indica que seguirá siendo un recurso para crear consensos de opinión y su esencia permanece intacta, aún cuando sus nombres varíen: propaganda, lavado de cerebro, mercadotecnia, etc.

Cuando una de estas “verdades” perdura a través del tiempo se convierte en un mito, paradigma o “paradogma”, como ha sido sarcásticamente definido por algunos autores.

Los mitos no se producen por generación espontánea. Detrás de ellos siempre se encuentra algún motivo, una intención para su creación. Los mitos no están dirigidos a los especialistas y conocedores del tema que abordan sino al público en general, que por diversas razones no tiene capacidad o interés de analizar.

Esta falta de capacidad o interés no está necesariamente relacionada con la inteligencia o la información de la persona que los recibe, los repiten y los hace suyos; entre sus víctimas se encuentran personas inteligentes e informadas que simplemente sucumbieron a la fuerza de persuasión del mito. La capacidad de análisis del público en general se extingue ante el constante bombardeo de mentiras o medias verdades a que se está sujeto diariamente.

Una de las características del mito – probablemente la más negativa- es que elimina o disminuye la capacidad de análisis del receptor.

Los fragmentos anteriores han sido tomados del libro de Felipe Ocampo Torrea, Pemex: Mitos, Realidades, Testimonios y Propuestas.

En fin, solo la historia permitirá ver el fin de este capítulo que hoy vivimos y que alcanza su cúspide con la solicitud de traslado al panteón nacional sin cumplir los requisitos previos, de los restos mortales de Hugo Chávez y cambiado para el embalsamamiento y colocación en una urna de cristal para que pueda ser visto por la eternidad según palabras del Vicepresidente de la República, pero nadie puede negar el hecho que ha comenzado la construcción del mito para satisfacción de esa parte de la población venezolana.