martes, 26 de julio de 2016

EDUCACIÓN, CAMBIO, REFORMA E INNOVACIÓN

La educación es globalización y por tanto, factor clave para el desarrollo de los pueblos y desde hace algún tiempo se encuentra cuestionada por distintos sectores, algunos con base a los resultados obtenidos que se consideran pobres dado el desempeño de quienes han pasado por las aulas de las instituciones educativas a todos los niveles, otros por la poca adecuación a los criterios post, postmodernos, ya que el individuo demanda atención a sus necesidades personales en muchos casos enmarcadas dentro del egoísmo y personalismo más que del bienestar común. En otros casos se le cuestiona con base a medidores e índices que no siempre reflejan la realidad del mundo educativo y así, podemos conseguir un sinfín de discusiones dónde hay para todos los gustos.
Lo que parece olvidarse a la hora del cuestionamiento, es la realidad psico afectiva y socio, histórico, política y económica que se vive en esta segunda década del siglo XXI y las consecuencias que de ello se derivan, para los estudiantes a los distintos niveles.
Al ver y con mucha preocupación la escalada terrorista que se vive en este segundo lustro de la segunda década del siglo XXI así como los tiroteos y muertos que se suceden de manera continua en los campus educativos por cuestiones raciales o de discriminación, tenemos la obligación de preguntarnos ¿Qué está pasando con la educación en los distintos países?, ¿será que en realidad ha fracasado el modelo educativo a nivel global?
No podemos ver con indiferencia las actuaciones de los fundamentalistas o radicales, cuando con base en sus dogmas, vemos como torturan y matan a una gran cantidad de personas por estar en contra de sus creencias, logrando con esto el rechazo generalizado de quienes no son afectos a sus credos y produciendo rechazo también a todas las religiones distintas a la nuestra, aún sin conocer sus fundamentos, ni entender que no todas validan esas actuaciones. Tenemos que entender, aunque sea difícil, que la educación para la paz no ha logrado los triunfos que se esperan o que la educación para la guerra y muerte está triunfando en el mundo entero, ¿cual de las dos premisas se estará cumpliendo?
Pero en realidad, ¿cuál debe ser el factor de medición del éxito del proceso educativo?, ¿Los millones de egresados como profesionales o técnicos que se incorporan a los mercados laborales o la cantidad de desertores y de profesionales o técnicos que utilizan la educación recibida para engrosar las filas de la delincuencia y el terrorismo?
El ejemplo viene a colación ya que parece que el hombre post, postmoderno busca un regreso a sus orígenes y la educación recibida viene siendo rechazada por ser considerada superflua y alejada de los fundamentos que marcaron el origen del hombre sobre la faz del planeta, pero esto no sucede solamente en el oriente del mundo, también sucede en mundo occidental y con mucha fuerza e impacto en la sociedad.
Hay intolerancia de parte de todos los bandos actuantes en la realidad actual, ya que unos propugnan muerte y destrucción y otros propugna muerte y destrucción a los que quieren muerte y destrucción, generándose así la inminente espiral que nos conduce irremediablemente al círculo vicioso y sin salida, por lo que cabe preguntarse, ¿Qué pasó con la educación recibida?, ¿será que no pudo dar respuesta a las necesidades personales para lo convivencia?, ¿será que realmente se impone el personalismo y las necesidades individuales sobre el bien común?, ¿porque no se ha podido formar un estudiante para la paz?
No cabe duda que debemos revisar las actuaciones propias y las ajenas que se suceden dentro del mundo educativo, ya que definitivamente, es la educación en todos sus niveles y modalidades, la herramienta para formar individuos preparados no solo para el ejercicio de un oficio o profesión, sino también individuos capacitados para la paz, la tolerancia, el convivir y el bienestar colectivo.
El bulling, la exclusión, el fanatismo, los radicalismos, la intolerancia y los antivalores como la venganza, la destrucción y el odio entre otros, que vemos ya como algo cotidiano en la sociedad, conviven en las aulas de las distintas instituciones educativos a lo largo y ancho del orbe terráqueo, lo cual lleva a nuestros docentes a una lucha titánica no siempre superada de manera exitosa y para la cual se encuentran en desventaja, dadas las condiciones de trabajo y las características propias de los sistemas educativos.
Realidades como las descritas nos obligan a pensar en cambio, reforma, mejoras e innovación a los sistemas educativos, con el agravante que no siempre conocemos los verdaderos significados de los términos descritos y sus implicaciones para el proceso de formación de personas comprometidas personal y profesionalmente con un mundo mejor.
  • Cambio educativo, es el término mayor y se refiere a cualquier modificación de la realidad educativa, que puede concebirse como proceso y resultado, como algo deliberado o espontáneo y que puede ocurrir en ámbitos macro, meso o micro.
Para Arturo Delgado Santos: El tema del cambio educativo es crucial para quienes laboramos y estamos involucrados en el quehacer docente. Se trata de un concepto que implica dos elementos psicoafectivos inherentes al mismo: esperanza y frustración. Un cambio educativo va más allá del deseo o la voluntad, implica planificación y metodología, pero, a pesar de ello, sus posibilidades siempre son inciertas. No tenemos que ir muy lejos para constatar este grado de dificultad, simplemente con observar el escenario actual, nos percatamos que gran parte del proceso educativo, se arropa con elegantes términos, pero abona a la ineficacia y simulación de los principales actores implicados.
Según Manuel Fernández Cruz: El cambio educativo debe ser autorrenovación en la organización, institucionalización de las estrategias de mejora continua, instauración de un clima de colaboración y creación de mecanismos de resolución de conflictos, además de cambio en la toma informada de decisiones para la gestión de la organización. El cambio está, por tanto y siempre, ligado a estrategias de innovación del trabajo docente. Por eso han surgido movimientos que agrupan diversas líneas de cambio, que no pueden basarse exclusivamente en modificaciones de la estructura organizativa aunque, por supuesto, el cambio procure también la transformación de las organizaciones que han sido creadas desde y para la estabilidad, en organizaciones que deben ser estructuradas en torno al propio concepto de cambio, como mecanismo de adaptación a un sistema social y educativo cambiante. En ello es posible reconocer una adaptación al marco interpretativo de la escuela como realidad cultural,lo que no es ajeno al marco de análisis crítico de la micropolítica escolar en el seno de la organización, en su reconceptualización.
Una de las consecuencias más relevantes de los cambios en el sistema educativo venezolano, ha sido la ampliación de las responsabilidades y de los desafíos para el profesional de la docencia. El Sistema Educativo Bolivariano, a través del Currículo Bolivariano, introduce cambios en la relación educando-docente y también en la vinculación escuela y comunidad. Se dinamiza la labor del maestro y la extiende a las comunidades y a las familias, es decir, se fortalece la figura del maestro preocupado por su entorno y se multiplican sus tareas de acuerdo con las necesidades del niño y la comunidad.
  • Reforma educativa, se refiere al cambio en el sistema educativo, global o parcial, intencional y profundo, que responde a una política educativa determinada, que ha emanado del Estado, que se produce con intención de perdurar y que genera una normativa de orden superior. Su lugar natural es «el sistema». Sin embargo, el estudio sobre las reformas educativas, debe ser de sumo interés y ciertamente relevante para la temática que nos ocupa, pues la inclusión educativa debería ser, una cuestión nuclear y transversal a todo el sistema educativo.
En opinión de Julián Pérez Porto y Ana Gardey, el concepto de reforma educativa se encuentra comprendido por dos términos bien diferenciados entre sí. El primero de ellos (reforma), se encuentra vinculado con la acción y efecto de reformar o reformarse. Como verbo su significado es modificar o enmendar algo, se utiliza por ejemplo para referirse a la restitución de una orden religiosa a su disciplina primitiva. El segundo concepto (educativo), hace referencia a lo que pertenece o es relativo a la educación, siendo esta la forma en la que se denomina el proceso de socialización de las personas. A través de la educación, las personas asimilamos y aprendemos conocimientos, desarrollando una concienciación conductual y cultural.
Tomado de http://reformaeducativa.blogspot.com/, en la actualidad, la escuela –a manera personal– no está cumpliendo satisfactoriamente la función de formar a las futuras generaciones para su desempeño ciudadano para una sociedad tan cambiante como esta. Según Tedesco (1995), el profundo proceso de transformación social ha traído como consecuencia la aparición de nuevas formas de organización sociocultural, económica y política. Es por ello que hoy día se escuchan frases como: "sociedad capitalista", "sociedad industrial", "sociedad de la información". Una mirada a esta situación desde el punto de vista educativo, nos conlleva a reafirmar que el conocimiento es la vía para la organización social y económica de un país y la educación, entendida como el medio a través de la cual se produce y se distribuye éste conocimiento, no puede hacer caso omiso ante esta situación, sino más bien debe acoplar las diversas disciplinas al contexto donde interactúa el principal actor del proceso de enseñanza y aprendizaje: el alumno. No existe ninguna disciplina que se pueda aislar de la realidad.
La educación es un factor determinante para la capacitación de los pueblos, para lograr el crecimiento personal de cada ser humano, así como para amoldarse a los requerimientos que impone la sociedad basada en el conocimiento y la informática. El grado de desarrollo de una sociedad está condicionado cada vez más por el nivel educativo que demuestran sus integrantes, mientras que la miseria y la pobreza se originan fundamentalmente de la ignorancia en general y de la ignorancia tecnológica en particular. La actual reforma del sistema educativo venezolano, presenta como uno de sus aspectos más importantes una nueva concepción curricular.
El objetivo prioritario de la reforma ha sido el de mejorar la calidad de la enseñanza. En concordancia con este objetivo se planteó una reestructuración del currículum, vista como una nueva concepción de la gestión escolar, como un cambio con detenimiento que se refleja en los Proyectos de Aprendizaje. Esta nueva concepción del currículo se basa en el constructivismo como sustento psicopedagógico, sin embargo, no descarta otras teorías del aprendizaje que tienen elementos en común con este enfoque.
  • Innovación educativa, es un proceso intencional de cambio llevado a cabo por un docente o grupo de docentes que modifican el currículo o la organización y cuyo lugar natural es el aula. Innovación y mejora son los planos en los que el profesorado debe centrar su atención pues son los que quedan al alcance de su acción profesional. Puede darse o quedar aislada.
Al respecto, Ángel Fidalgo nos dice lo siguiente: cualquier innovación introduce novedades que provocan cambios, esos cambios pueden ser drásticos (se dejan de hacer las cosas como se hacían antes para hacerlas de otra forma) o progresivos (se hacen de forma parecida pero introduciendo alguna novedad); en cualquier caso el cambio siempre mejora lo cambiado, es decir, la innovación sirve para mejorar algo.
La mejora puede ser reducir el esfuerzo, reducir el costo, aumentar la rapidez en obtener resultados, aumentar la calidad, satisfacer nuevas demandas, entre otros factores.  Para que estas innovaciones tengan éxito, el costo de introducirlas debe ser asequible para los usuarios de dichas innovaciones. Los cambios drásticos suelen llevar asociado un alto costo y únicamente se incorporan en situaciones límite o estratégicas, sin embargo los cambios progresivos suelen llevar asociados un bajo costo y son perfectamente asumibles.
Una forma de incorporar novedades que produzcan cambios progresivos, consiste en incorporar nuevas tecnologías que han demostrado éxito en otros campos, en este sentido utilizar tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC´s) en distintos productos y servicios, produce cambios que consideramos innovación, ya que mejoran el producto y el servicio y los adaptan a nuevas demandas.
Llevando todo esto al proceso educativo y descartando que en un corto espacio de tiempo se produzca un cambio drástico, la innovación educativa introduciría novedades que mejorarían el proceso formativo, pero siempre con un costo asequible, la incorporación de las TIC´s podría producir esa innovación educativa. Actualmente, desde el punto de vista social, el éxito de un proceso formativo para un alumno (y sus padres), es aprobar la asignatura, a más nota más éxito.
Por otro lado, Arturo Barraza Macías, nos dice que: hablar de innovación supone, en primer lugar, la necesidad de establecer con claridad, los diversos significados que se dan al término y su relación con conceptos como el de cambio y el de mejora que, en muchas ocasiones se utilizan como sinónimos, pero que no son tales, aunque su significado pueda estar estrechamente vinculado con la innovación.
Con base en la etimología del término, se puede hablar de innovación, en el sentido de la sola introducción de algo nuevo y diferente, sin embargo, este significado, deja abierta la posibilidad que ese "algo nuevo" sea o no, motivo de una mejora, tan nuevo sería un método que facilita la mejora de la comprensión lectora, como uno que la inhibe.
Algunas veces, el término innovación, es utilizado para designar una mejora con relación a métodos, materiales, formas de trabajo, entre otras cosas, utilizados con anterioridad, pero la mejora por sí sola puede, o no, ser innovación, por ejemplo, un método puede mejorar porque se aplica con más conocimiento de causa o con más experiencia y en este caso no hay una innovación, mientras que si el método mejora por la introducción de nuevos elementos, la mejoría podría ser asociada entonces a una innovación.
Sin entrar al análisis detallado ni a sentar postura sobre los conceptos mostrados por los diversos autores, dado el hecho de interdependencia entre ellos, nos queda una ardua tarea por delante y una gran responsabilidad individual, que debe concatenarse con la de otros colegas para hacer de este proceso, un hecho colectivo, ya que darle respuesta a las necesidades de la sociedad, supone un intercambio de ideas y un construir colectivo, dónde de manera amplia y productiva, con el respeto a todas las corrientes del pensamiento y de los actores involucrados, pueda diseñarse un modelo y un sistema educativo que permita la generación de una nueva cultura global, productiva y social, sin exclusiones ni discriminaciones, para la formación y educación de personas comprometidas con la paz y la convivencia de todos quienes habitamos el planeta, en concordancia con criterios ecológicos que permitan cuidar nuestro hogar global y el uso racional de los recursos naturales.

Debemos deslastrarnos de los criterios de fracaso y derrota en materia educativa. Tenemos logros, que son muchos, aunque también tenemos factores pendientes que deben ser solucionados de manera exitosa. La lucha debe ser global, respetando las idiosincrasias y las culturas, pero haciendo del planeta el factor común, que debemos compartir de forma tolerante para el beneficio de todos y sobre todo de las generaciones venideras, a quienes debemos legar un mundo de alegrías y no de guerras, penas y desazón. Que las lágrimas sean de alegría y no de pena ni dolor por muertes inútiles e innecesarias y la educación es la vía para lograrlo, pero debemos cambiar para poder cambiarla. Ese es el reto. La cultura debe ser la de la paz y la convivencia en un mundo productivo que permita disponer la riqueza de manera equitativa.