En el
post anterior hablamos de la gente tóxica, por lo que corresponde ahora hablar
de gente exitosa y de esta manera mantener el equilibrio que nos permita ver
siempre las dos caras de la moneda.
El éxito
siempre nos ha atormentado y en ocasiones también nos ha confundido. No siempre
sabemos definir acertadamente el éxito ni a la gente exitosa y por ello,
abordar este tema se convierte en reto.
Lo
primero que debemos abordar es la etimología de la palabra y al respecto
tenemos que: La palabra éxito proviene del Latín exitus que se
refiere a salida, y está relacionada con "Resultados Felices".
Para http://sobreconceptos.com/,
también se define éxito como: la situación en la cual se ha alcanzado
un objetivo previamente fijado. El éxito, sin embargo, es un concepto
subjetivo, ya que cada persona puede tener una percepción personal y
completamente distinta de lo que es el éxito. Así, mientras que para algunos
el éxito es simplemente el poseer medios económicos
suficientes, para otros tiene un significado más profundo y hasta espiritual.
En esta encrucijada, se pueden distinguir distintos tipos de éxito, entre la
mayoría de las personas. El primer tipo de éxito se podría resumir como la
situación en la que se ha alcanzado un estatus social deseable. El estatus
social es el lugar que una persona ocupa dentro de una sociedad y en
este contexto, mucha gente cree que el éxito es llegar a los escalones más
altos de la pirámide social, ya que suelen estar relacionados con el reconocimiento,
el honor, la fama y la fortuna.
Otro tipo
de éxito es, simplemente, el alcanzar una meta en la vida. Cosas
como el graduarse, formar una familia plena, comprar un auto o mudarse a una
nueva ciudad, proporcionan a la persona una sensación de éxito y satisfacción
personal. En este sentido, se puede decir que el éxito es lo opuesto al
fracaso, y para una persona el éxito puede estar tanto en metas grandes
como en pequeñas acciones del día a día.
Para ser
exitosos ayuda tener una definición personal de éxito, para Gandhi
probablemente era la libertad de su pueblo, para la Madre Teresa de Calcuta la
atención de cada ser que lo necesite en este mundo, y ¿para nosotros?, ¿tenemos
claro lo que consideramos éxito y como ser exitosos?
Se puede
establecer una definición de lo que consideramos éxito por lo menos desde tres
perspectivas, desde lo que deseamos "tener", lo que deseamos
"hacer" y lo que queremos "Ser". Pero estando
claros que el tener y el hacer pueden volverse contra nosotros y acabar con
nuestro éxito si nuestro "Ser" no está en concordancia con los
deseos anteriores.
¿Qué
hacer entonces?, lo más sencillo en este caso es mirar hacia dentro y
encontrarnos con nosotros mismos, para conocer cuál área de la vida nos
permitiría expresar lo mejor de nosotros, es necesario conocernos a nosotros
mismos primero y saber lo que deseamos alcanzar, lo que queremos hacer y lo que
necesitamos “Ser”. El éxito no es cosa de magia o de suerte, es cosa de
actitud.
En línea
general, todas las personas quieren ser exitosos en la vida, los negocios, el
trabajo, los estudios, el amor, con la familia y los amigos, el gran secreto
para lograrlo es cambiar la forma de pensar para poder cambiar la
forma de actuar, ya que como pienses, te verán y veras la vida y en
consecuencias actuaras.
El
éxito es dejado de lado por muchos, quienes creen que es necesario tener suerte
en la vida para triunfar, o confunden fortuna con éxito y realmente, esto
no es más que un grave mito que las personas han terminado creyendo, ya que
como seres humanos, contamos con un potencial mucho mayor del que creemos.
Según Juan
Sebastián Celis Maya, para ser exitosos en la vida, se debe aplicar cada
vez más conciencia a nuestras decisiones, Esto quiere decir, que cada decisión
que tomemos, y cada cosa que hagamos día a día, deben estar guiadas por nuestra
conciencia y no por razonamientos subconscientes que anulan nuestra
racionalidad.
Miguel
Ángel Cornejo establece algunas diferencias entre la mediocridad y la
excelencia y de manera resumida, pueden mostrarse así: Cuando el mediocre
siente deseos de trabajar se busca un lugar tranquilo y espera pacientemente
que esos deseos se le pasen, en tanto, el ser excelente hace todo aquello que
el mediocre no sería capaz de realizar y está convencido que, solamente a
través de su entrega incondicional y generosa el mundo puede mejorar, es
protagonista del cambio, es el arquitecto social de su tiempo, el ser excelente
es por supuesto un triunfador. Sus características más relevantes son:
El ser
excelente saluda al nuevo día con mil proyectos por realizar, sabe que para
disfrutar el descanso debe terminar el día sin gota de energía, disfruta la
noche después de un largo día luchando por alcanzar estrellas, reta a quienes
le rodean a luchar, renuncia a todo aquello que obstaculiza sus sueños, el
trabajo significa el medio para alcanzar todo lo que desea.
El ser
excelente arrebata tareas y como líder va siempre adelante, está consciente que
son tiempos de construir y que ya tendrá tiempo en la eternidad para descansar
en paz, el día es corto, por todo lo que tiene por realizar, su peor enfermedad
es sentirse inútil, porque sabe que en sus deseos está la dimensión de sus
realizaciones.
En fin,
podemos decir que el éxito, no es más
que la consecución de los objetivos y metas propuestas por una persona en
determinado instante, sean éstos ambiciosos o no, incluso se puede hablar de
éxito en los pequeños detalles de la vida.
Debemos
recordar que, el éxito es visto de forma distinta por las personas, lo que para
unos es ser exitoso, para otros puede no serlo. Lo importante es como cada uno
de nosotros conceptualiza “su éxito” y como lo compagina en sus distintos
ámbitos, es decir, en lo personal, familiar, profesional y social y no olvidar
los valores y criterios éticos que debemos poner en juego cuando buscamos ese
éxito.
Mucha
gente ha propuesto caminos distintos para llegar al éxito o alcanzarlo,
incluso, se han escrito obras completas y hasta manuales, se han desarrollado
videos y cursos, pero lo cierto del caso, es que este es un camino que no
conoce formulas matemáticas ni químicas, ni biológicas, tampoco recetas, ni
yerbas o pócimas, que de forma mágica nos lleven a él. Lo más seguro es, que la
combinación de una buena dosis de actitud positiva, perseverancia, autoestima,
pasión, amor, autoconocimiento, objetividad, visión y optimismo, nos permitan
alcanzarlo.
Muchas
veces nos dejamos llevar por el pesimismo o el malestar al ver que algo nos
sale mal, o que no conseguimos lo que queremos, o que nuestro éxito aún
no llega. Son muchos los que ante la primera señal de problemas dejan de
insistir y abandonan todo, pero también existen otros que continúan pese a todo.
Algunos
personajes famosos han tenido que persistir y por eso han logrado convertirse
en exitosas en determinados campos, ejemplos de ello, lo vemos a continuación:
Henry
Ford: antes de crear la famosa empresa de autos, Ford Motor
Company, Henry Ford estuvo en banca rota 5 veces.
Walt
Disney: antes de ser conocido mundialmente por sus parques de
atracciones, Walt Disney, comenzó una serie de negocios y fracaso en todos,
llevándolo a la bancarrota.
Albert
Einstein: comenzó a hablar a los 4 años y a leer a los 7. Los maestros
pensaron que tenía un retardo mental, era anti-social y lento. Eventualmente lo
expulsaron de la escuela.
Thomas
Edison: el creador de la bombilla. Los maestros le decían que era
muy estúpido para aprender algo. Al final, después de 1000 intentos fallidos,
creo la famosa bombilla.
Steven
Spielberg. No consiguió ingresar en la University
of Southern California, ya que lo rechazaron tres veces, así que se decidió a
estudiar en otro lugar. La motivación no era demasiado, así que dejó los
estudios para conseguir ser director.
Marylin
Monroe: las agencias de modelaje le decían que debería mejor
considerar ser secretaria.
Oprah
Winfrey: conocida mundialmente por su impacto en la televisión y como
una de las mujeres más ricas y exitosas en el mundo. Oprah viene de una
infancia sombreada por el abuso sexual. Falló en terminar su grado académico
por un crédito y fue despedida como ancla de televisión por ser muy emocional.
Elizabeth
Arden: conocida por su imperio de cosméticos, Elizabeth Arden, no
terminó sus estudios académicos y encima fracasó tratando de vender cremas
faciales.
J.K.
Rowling: conocida por su libro Harry Potter, ¡lo que muchos no saben
es que su libro fue rechazado 12 veces!
Shakira: Aunque se
pudiera pensar que esta cantante colombiana nació triunfando, esto es falso. Al
principio en su natal Barranquilla le costó mucho trabajo sobresalir, la prueba
de ello es cuando grabó dos discos titulados "Magia" (en 1991) y
"Peligro" (en 1993) los cuales pasaron completamente desapercibidos.
La
actitud de esas personas que supieron perseverar sin miedo al ridículo y
creyendo en sus ideas, sueños y potencial, que les permitió alcanzar el éxito,
debe ser el ejemplo para nosotros, ya que si al igual que ellos desarrollamos
autoconfianza y perseverancia y clarificamos la diferencia entre éxito, fortuna
y suerte, así como la de negocio y empresa, podremos alcanzar las metas que
creemos inalcanzables. Para muchos el camino está en el emprendimiento y para
otros, simplemente en tomar la decisión correspondiente y ser los mejores en lo
que hacemos.
Temores siempre
los vamos a tener, lo fundamental es saberlos vencer y dedicarnos por completo
al área en la cual queremos ser exitosos, con pasión, amor y perseverancia. Lo
demás, sabremos manejarlo.